En invierno...

También se puede ir a la playa...

una de las ventajas de vivir tan cerca de ella...

es que la puedes aprovechar tanto en verano como en invierno...

y si bien en esta familia casi no la pisamos en verano...

porque entre que en Galicia hace un día bueno cada cuatro o a veces diez días...

y que yo no se que pasa pero suele coincidir que casualmente ese día es entre semana y a una menda le toca trabajar

y que al don le gusta más ir a la piscina...

Yo creo que al pobre todavía le dura el trauma de la primera vez que llevamos a Livi a la playa...

fue cuando Livi tenía seis meses imaginaros el planazo padres primerizos en primera expedición a la playa...

jajaja llevamos de todo hasta un iglú que compramos en decatlón para meter a Livi...

así que ya os podéis imaginar llegamos a las seis de la tarde a la playa cargados como mulas

ni un sitio en la playa como no podía ser de otra manera primer sábado que hacía bueno no cabía ni un alfiler

así que cuando conseguimos hacernos un hueco (bueno lo de hueco es un decir porque con toda la trapallada que llevábamos como os podéis imaginar un huequito lo que se dice un huequito no era)

comienza la odisea de pringarla de crema porque como se suele decir de tal palo tal astilla así que la niña más blanca no podía ser...

y cuando terminamos vino lo mejor darle la merienda...

cada vez que me acuerdo comió más arena que fruta...

y después de todo esto recoger todos los bártulos 

jajaja me canso sólo de recordarlo

y el baño de la noche fue mortal no conseguíamos quitarle toda la arena con tanta crema se le había quedado toda pegada...

así que desde aquella abusamos un poco de los abuelos y vamos a la piscina que total para cuatro días buenos que vienen tampoco incordiamos tanto...

así que retomando donde lo deje al principio a mi familia nos gusta más la playa en invierno porque podemos pasar domingos tan maravillosos como este del invierno pasado

 y además las fotos con el día nublado son fantásticas así que puedo disfrutar de mis dos pasiones mi familia y la fotografía.